Un buen desayuno [20 de Mayo, por ahora Kazuo]

- ¿En serio? Me alegra oir eso.

Y a Kazuo le alegro oír que le gustara escuchar eso. También sonrió.

- Tiene pinta de hacer buen tiempo hoy - comentó - Seguramente acabaré dando un paseo e investigando algún monumento más.

Cierto que hacía buen tiempo, aunque Kazuo no sabía que planes tenía el grupo hoy, quien sabe lo que habría preparado Adrian. Ya hacía un rato que habían acabado de desayunar y quizás la chica se quería marchar para aprovechar la mañana.

- Bueno si... tendré que ir a pagar. - Dijo el chico intentando divisar el camarero. Al encontrarlo le hizo un gesto con la mano para que se acercara y así poderle entregar un billete de diez para que cobrase, fue cómodo ya que Kazuo no necesitó levantarse para ir dentro a pagar. - Yo.. supongo que tendré que volver al hotel... no se que planes tienen para el grupo hoy... - Sonrió tontamente.

- Bueno si... tendré que ir a pagar. Yo.. supongo que tendré que volver al hotel... no se que planes tienen para el grupo hoy...

Pagó amablemente el desayuno y luego comentó eso.

- Entiendo, bueno... Se me hace tarde para mi próximo monumento.

Se levantó cogiendo el sombrero y volviéndoselo a poner.

- Ha sido un placer, Kazuo.

[FDI: PJ (Hitomi) movido con permiso de la user]

Hitomi se levantó y se volvió a colocar el sombrero, el desayuna ya se había terminado por lo que tenía que ponerse en camino, a conocer monumentos.

Kazuo también se levantó, algo nervioso por la timidez, la chica ya se iba y quien sabe si la volvería a ver...

- Esto... me ha encantado conocerte... y... bueno... - No le salían las palabras. - El placer es mío... - Dijo con dificultad.

La chica se dio media vuelta para continuar su camino mientras que Kazuo estaba aún allí plantado, bastante cortado... ¿Y si no la volvía a ver? Quería decirle algo, pero en verdad no sabía el qué. Peor al final, se armó de valor.

- ¡Hitomi! . - La llamó por su nombre mientras que, de unas zancadas, se dirigía hacia ella. Le puso la mano al hombro para que se girase y cuando la chica lo hizo la soltó.

Kazuo se rascó la nuca tímidamente. "Vamos Kazuo, di algo inteligente..."

- Esto... - Pronunció con dificultad, pues la vergüenza lo invadía. - ¿Te... te gustaría... salir alguna tarde conmigo...? - "Bien dicho Kazuo, ahora solo falta que te mande a freír espárragos". - Ya sabes... a tomar algún helado... dar un paseo... visitar algún monumento... lo que más te apetezca a ti...

Ambos se despidieron diciendo que había sido un placer. Se lo había pasado muy bien. Se dio la vuelta de forma suave y comenzó a caminar con parsimonia hacia cualquier parte, un lugar en donde observar edificios bonitos, cuando oyó su nombre. Iba a girarse cuando notó que el propio chico posaba una mano sobre su hombro para llamar su antención. Ella se giró con una sonrisa.

- Esto... ¿Te... te gustaría... salir alguna tarde conmigo...? Ya sabes... a tomar algún helado... dar un paseo... visitar algún monumento... lo que más te apetezca a ti...

Parecía que le costaba hablar, eso le hacía más encantador todavía.

- Por supuesto - dijo alegremente aún sonriendo.

Buscó en su bolso un bolígrafo y una tarjeta de cualquier empresa. Por detrás comenzó escribiendo su nombre "Hitomi" con una caligrafía casi perfecta y luego anotando su número.

- Llámame cuando quieras.

- Por supuesto - dijo alegremente aún sonriendo.

En ese momento a Kazuo le entró una tranquilidad enorme en el cuerpo, le había pedido una cita, en cierto modo, y ella había aceptado.

Observó como Hitomi rebuscaba algo en su bolso que se trataba de una tarjeta y un bolígrafo con los cuales escribió su nombre y su teléfono para entregárselo a Kazuo.

- Llámame cuando quieras.

Y tanto que lo haría, ya estaba deseando llegar al hotel para llamarla, peor no lo haría, no quería ser ningún pesado.

- ¡Te llamaré! - Afirmó con una sonrisa.

Se quedó mirando a la chica como se daba la vuelta y volvía a continuar su camino, esta vez sin que el chico volviera a interrumpirla. Él se dio la vuelta para volver hacia el hotel, pero, lo hizo después de tropezar un par de veces por andar hacia atrás despistado, mirando a la chica que se alejaba.